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martes, 8 de septiembre de 2015

¿Para qué ir a las elecciones en Grecia si la agenda la pone Alemania?, los griegos son masoquistas pues a pesar de la increíble traición de Syriza, es todavía el partido más votado. deducido en The economist

¿Para qué ir a las elecciones en Grecia si la agenda la pone Alemania?, los griegos son masoquistas pues a pesar de la increíble traición de Syriza, es todavía el partido más votado.





Muchos griegos no ven el punto de otra elección


http://www.economist.com/news/europe/21663689-referendum-has-taken-its-toll-many-greeks-dont-see-point-another-election







El referéndum ha cobrado su precio


08 de septiembre 2015 | Europa
Cronómetro

En la mañana del 25 de enero, con la promesa de un futuro mejor a partir de un fenómeno político advenedizo llamado Syriza en su mente, Vivi, una madre de 41 años de edad, de dos en Atenas, no podía esperar a que las encuestas para abrir. El 20 de septiembre, cuando se espera que los griegos a marchar de nuevo a urnas por tercera vez este año, ella está quedarse donde está. "Todos ellos resultaron ser lo mismo", dice ella. "¿Por qué necesitamos una elección? Pensé que les dio poder para encontrar soluciones, no llamar a un voto cada vez que no pueden resolver las cosas ".



Pero con el desempleo tercamente por encima del 20% y en la estela de caos económico desatado por la imposición de controles de capital en julio, Vivi sabe que las cosas para ella podría ser peor. Tome Georgia Galtemi. Una vez empleado en un trabajo farmacéutica bien remunerado, nuevo del 35-años de edad, el salario de 4,50 € por hora ($ 5.00) woudn't comprar un jugo de zanahoria en el café pijo donde ahora funciona. Sin la estabilidad política, sus posibilidades de conseguir su vida detrás en pista parecen bastante escasas.

"Las empresas tienen dificultades para contratar personal porque no tienen ni idea de si van a estar alrededor en el plazo de un mes", dice ella.

 Las temblorosas situación política, los controles de capital y siempre cambiantes normas tributarias hacen que sea difícil para las empresas para planificar el futuro.

Entre su círculo de amigos y familiares, el ambiente de celebración del referéndum de julio, en la que los griegos rechazaron manera europea a la austeridad sin efecto ha dado a un estado de ánimo de cinismo corrosivo. Muchos de los que apoyaron el gobierno izquierdista Syriza con la esperanza de iniciar una era de políticos honestos se sienten traicionados. Alexis Tsipras prometió poner fin a la austeridad. Pero cuando Europa dejó en claro que Grecia no podía tener eso y su lugar en la zona euro, se trasladó en lugar de golpear a otro duro trato con Europa. Como ella dice, nadie ve el punto en otra votación.

Además, dice, no hay nadie digno de votar por. Syriza, que prometía mucho, ha decepcionado repetidamente. Más recientemente, un referéndum sobre un paquete de rescate de la UE fue rotundamente rechazada por los votantes griegos. Poco después, el gobierno dijo que aumentar los impuestos sobre la educación privada en un 23%.

Los salarios pueden caer hasta en un 26%.
En cuanto a los impuestos, no se sabe qué esperar.

La desilusión es visible en datos de las encuestas publicadas por delante de las elecciones generales de 20 de septiembre, el cuarto Grecia ha visto desde mayo de 2012. Los dos partidos principales (Syriza y Nueva Democracia) están muy lejos de la mayoría. Entre una quinta y una décima parte de los votantes permanecen indecisos. Vassilis Leventis de la Unión Centrista, considerada durante mucho tiempo una broma política, parece que va a entrar en el Parlamento por primera vez. Sus travesuras han mantenido siempre su partido al margen de la vida política griega; famoso por sus prolijos en vivo, el Sr. Leventis es mejor conocido por llamar a los dioses de la muerte se extendió entre los líderes de los principales partidos de Grecia.

Los que no son cínicos son apáticos. De regreso a su nativa Tesalónica en julio, después de tres años de trabajo en Alemania y Gran Bretaña, Giorgos Galanis, un DJ de radio, dice que:

"La gente se siente indignado y sospechosa. Trato de quedar al margen para evitar deprimirse. No me importa votar cada cierto tiempo, siempre y cuando exista una razón. Esta vez simplemente dejar de verlo ".

Sus puntos de vista son repetidas por Christina Goutsiou, el propietario de una pequeña peluquería-ateniense. Un votante interesado en las pasadas elecciones, la Sra Goutsiou dice que ella puede optar por echar a perder su voto. A pesar de su desilusión, sin embargo, ella se consuela a sí misma mirando a la imagen más grande. "Veo a los refugiados desesperados de llegar a Grecia en sus miles de personas cada día y me digo a mí mismo, imagino estar en sus zapatos. Es sólo una elección sin sentido, sobreviviremos ella ".


El resultado más probable de la votación de la próxima semana es otra coalición y aún más austeridad. Pero no apostaría por ello. Tsipras, cuyo partido es probable que gane el mayor número de escaños, está en contra de las alianzas con otros partidos principales. Si los números no cuadran y los grandes partidos no llegan a un acuerdo, la elección de la próxima semana sólo podría dar lugar a otro

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