Lo que significa Grecia
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Paul
Krugman 18 MAR 2012 - 01:01 CET29
Un
grupo de jubilados protesta en Atenas contra los recortes / Alikis
Konstantinidis (Efe)
De
modo que Grecia ha faltado oficialmente al pago de su deuda con las entidades
crediticias privadas.
Ha sido una suspensión de pagos ordenada,
negociada más que simplemente anunciada, lo que supongo que es algo bueno.
Aun
así, la historia está lejos de haber terminado.
Incluso
con este alivio de la deuda, Grecia —como otros países europeos obligados a
imponer austeridad en una economía deprimida— parece condenada a muchos años
más de sufrimiento.
Y esa es una historia que es necesario
contar.
Como se señalaba en un informe reciente sobre
política económica, durante los dos últimos años la historia griega ha sido
“interpretada como una parábola de los riesgos del despilfarro fiscal”.
No pasa ni un solo día sin que algún político
o experto recite, con el tono de un hombre que transmite una gran sabiduría, la
cantinela de que debemos recortar drásticamente el gasto público de inmediato o
nos encontraremos con que nos hemos convertido en Grecia; en Grecia, les digo.
Por poner solo un ejemplo reciente, cuando Mitch Daniels,
gobernador de Indiana, pronunció la
respuesta republicana al discurso sobre el Estado de la Unión, insistió en que
“solo estamos a una corta distancia por detrás de Grecia, España y otros países
europeos que ahora se enfrentan a la catástrofe económica”. Por cierto, parece ser que nadie le dijo
que España tenía una deuda pública baja y un superávit presupuestario justo
antes de la crisis; el país está en apuros por culpa de los excesos del sector
privado, no del sector público.
España está en apuros por culpa de los
excesos del sector privado, no del sector público
Pero
lo que la experiencia de Grecia realmente demuestra es que, aunque tener
déficits en tiempos de bonanza puede crearle problemas a uno —lo que
efectivamente sucedió en el caso de Grecia, aunque no en el de España—, tratar
de eliminar los déficits una vez que uno ya tiene problemas es buscarse una
depresión.
En
estos momentos, las depresiones causadas por la austeridad son visibles en toda
la periferia europea.
-Grecia
es el peor caso, con un desempleo que se ha disparado hasta el 20%, al tiempo
que los servicios públicos, entre ellos la sanidad, se hunden.
-Pero
Irlanda, que ha hecho todo lo que la tropa de la austeridad quería, está
también en una situación terrible, con un paro cercano al 15% y un PIB real que
ha caído más de un 10%. Portugal y España pasan por dificultades similares.
Y la
austeridad en época de crisis no solo inflige un enorme sufrimiento.
Hay cada vez más pruebas de que es contraproducente
incluso desde un punto de vista puramente fiscal, ya que la combinación de una
disminución de los ingresos debida a una economía deprimida y unas peores
perspectivas a largo plazo reduce la confianza del mercado y hace que la carga
de la deuda futura sea más difícil de manejar. Hay
que preguntarse cómo pueden unos países que están negándole sistemáticamente un
futuro a su población joven —el paro juvenil en Irlanda, que antes era más bajo
que el de EE UU, ahora alcanza casi el 30%, mientras que está cerca del 50% en
Grecia— lograr un crecimiento suficiente para pagar su deuda.
Quienes
intentan convertir a EE UU en Grecia son los que piden más austeridad
Esto no era lo que se suponía que debía
suceder. Hace dos años, cuando muchos responsables políticos y expertos
empezaron a pedir que se pasase del estímulo económico a la austeridad,
prometieron grandes beneficios a cambio del sufrimiento. “La idea de que las medidas de austeridad pueden desencadenar una
situación de estancamiento es incorrecta”, afirmaba Jean-Claude Trichet, el entonces presidente del Banco Central Europeo, en junio de 2010. En lugar de eso, insistía, la disciplina fiscal inspiraría confianza y
eso conduciría al crecimiento económico.
Y
cada pequeño indicio de mejora en una economía sometida a la austeridad se ha
acogido como prueba de que la política funciona.
Se ha proclamado que la austeridad irlandesa
era una historia de éxito no solo una, sino dos veces: primero en el verano de
2010 y nuevamente el pasado otoño; en cada ocasión, la supuesta buena noticia
se esfumó rápidamente.
Puede
que se pregunten ¿qué
alternativa tenían países como Grecia e Irlanda,?
y la respuesta es que no tenían ni
tienen buenas alternativas aparte de la de abandonar el euro, una
medida extrema que, siendo realistas, sus dirigentes no pueden tomar hasta que
todas las demás opciones hayan fracasado (una situación a la que, si quieren
saber mi opinión, Grecia se aproxima a
toda velocidad).
Alemania y el Banco Central Europeo podrían
tomar medidas para hacer que esa solución extrema sea menos necesaria, pidiendo
menos austeridad y también haciendo más para impulsar la economía europea en su
conjunto.
Pero
la cuestión principal es que EE UU sí que tiene una alternativa: tiene su
propia moneda y puede adquirir préstamos a largo plazo a unos intereses más
bajos que nunca, de modo que no tiene que entrar en una espiral descendente de
austeridad y contracción económica.
Así que ha llegado la hora de dejar de
invocar a Grecia como una historia con moraleja sobre los peligros de los déficits;
desde un punto de vista estadounidense, Grecia debería más bien considerarse
una historia con moraleja sobre los peligros de intentar reducir los déficits
demasiado deprisa, mientras la economía sigue estando profundamente deprimida. (Y sí, a pesar de que últimamente haya
habido algunas buenas noticias, nuestra economía (la de
EEUU) sigue estando profundamente deprimida).
La verdad es que si quieren saber quién está
en realidad tratando de convertir a EE UU en Grecia, no son los que instan a
que haya más estímulos para nuestra economía todavía deprimida; son las
personas que exigen que emulemos la austeridad griega, aun cuando no nos
enfrentamos a unas restricciones crediticias como las de Grecia, y que de esa
forma nos hundamos en una depresión similar a la griega.
Paul Krugman es profesor de Economía en Princeton y premio Nobel
2008.
© 2012 New
York Times News Service. Traducción de News
Clip
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