Indicaron que la visibilidad muy reducida interrumpió el reconocimiento aéreo, lo que hizo mucho más difícil seguir la situación sobre el terreno. Añadieron que la operación defensiva en Pokrovsk se había vuelto sensiblemente más exigente, ya que la niebla persistió sobre la ciudad durante toda la jornada anterior, obstaculizando el trabajo de las unidades ucranianas.

A su juicio, estas condiciones otorgan ventaja a las fuerzas rusas, al permitirles avanzar más dentro de la ciudad y preparar nuevas acciones ofensivas con mayor libertad de movimiento.