El Banco de Japón elevó las tasas el viernes, llevando los costos de endeudamiento de Japón a un máximo de 30 años mientras la inflación sigue elevada, el yen se negocia débil frente al dólar y los salarios reales continúan cayendo.

El banco central aumentó su tasa de interés de corto plazo del 0,5% al ​​0,75% el viernes, tras una reunión de dos días. La decisión era ampliamente esperada por economistas y analistas.

La medida lleva las tasas de interés de Japón por encima del 0,5% por primera vez desde 1995.

Se trata del primer aumento de tipos por parte del banco central desde enero.

Está previsto que el gobernador del BOJ, Kazuo Ueda, hable más tarde el viernes.