Ucrania desesperada por mantener a Trump de su lado en las conversaciones de paz, mientras salva su soberanía
- Durante el fin de semana se celebraron en Suiza conversaciones entre funcionarios estadounidenses y ucranianos después de que la semana pasada se supiera que Rusia y la Casa Blanca habían elaborado en secreto un plan de paz de 28 puntos.
- El plan, ampliamente difundido por los medios, fue visto como prorruso.

Los funcionarios ucranianos han pasado el fin de semana luchando por recuperar el terreno perdido en las conversaciones con Estados Unidos sobre un plan de paz para poner fin a la guerra con Rusia, y Kiev tiene que caminar por una delgada línea entre mostrar a Estados Unidos que está dispuesto a participar en las discusiones y, al mismo tiempo, estar ansioso por salvaguardar su soberanía e integridad territorial.
Durante el fin de semana se celebraron en Suiza conversaciones entre funcionarios estadounidenses y ucranianos después de que la semana pasada se supiera que Rusia y la Casa Blanca habían mantenido conversaciones secretas y habían elaborado un plan de paz de 28 puntos que favorecía en gran medida las demandas de Moscú.
El plan, en el que Ucrania no había participado, incluía condiciones controvertidas, entre ellas que Ucrania hiciera concesiones territoriales y militares entregando la región oriental del Donbás y reduciendo su ejército en un 50%, así como otras propuestas que cruzaban las “líneas rojas” de Ucrania.
Aunque los informes de los medios de comunicación sobre el “plan de paz” fueron recibidos inicialmente con un silencio sombrío por parte del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, y sus aliados europeos, algunos analistas dijeron que equivalía a una capitulación ante las demandas territoriales maximalistas de Rusia.
Mientras tanto, el presidente estadounidense, Donald Trump, lanzó un ultimátum a Kiev para que responda al plan antes del jueves y el presidente ruso, Vladimir Putin, señaló su aprobación del plan, diciendo que formaba la “base de un acuerdo de paz final”.
Rompiendo su silencio sobre las propuestas el viernes pasado, Zelenskyy dijo que Ucrania enfrentaba uno de los momentos más difíciles de su historia y que esencialmente se enfrentaba a una elección entre “perder su dignidad o perder un socio clave”, refiriéndose a Estados Unidos.
Conversaciones bajo presión
El sábado, Trump apretó las clavijas al publicar en Truth Social que Ucrania había mostrado “cero gratitud” por los esfuerzos de paz de Estados Unidos, añadiendo una capa extra de presión presidencial a las conversaciones celebradas entre Estados Unidos y Ucrania el domingo.
Aunque se revelaron pocos detalles, las conversaciones, en las que participaron el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y una delegación ucraniana encabezada por el principal asesor de Zelenski, Andriy Yermak, parecen haber transcurrido satisfactoriamente. Rubio declaró a la prensa que ambas partes habían logrado “progresos considerables” y que los negociadores habían elaborado un “marco de paz actualizado y perfeccionado” que se elaboraría esta semana.
Si bien Ucrania puede haber aceptado que la membresía en la OTAN es poco probable (y esta es una de las demandas clave de Rusia), esto significa que las garantías de seguridad de posguerra son cruciales para Kiev.
Ucrania también se ha mostrado reacia a ceder territorio ucraniano parcialmente ocupado a Rusia y sus aliados europeos, temiendo que Rusia simplemente se reagrupe y organice otra invasión en el futuro para apoderarse de más territorio ucraniano. Kiev ha reiterado su postura de que necesita una “paz justa y duradera” y no un acuerdo intransigente.
Cuando se le preguntó sobre las garantías de seguridad entre Estados Unidos y Ucrania incluidas en el documento, Rubio fue vago pero dijo a los periodistas el domingo:
Creo que todos reconocemos que, para poner fin a esta guerra, Ucrania debe sentirse segura y segura, sin posibilidad de ser invadida ni atacada nunca más. Así que, sin duda, es algo que debe discutirse. Creo que hemos avanzado considerablemente en ese y otros puntos.

Rubio admitió que el progreso de las conversaciones con Ucrania dependía de la aprobación de Rusia, afirmando: “Independientemente de lo que hayamos logrado hoy, obviamente, ahora tenemos que aplicar lo que hayamos logrado. Si logramos ese acuerdo con la parte ucraniana a la parte rusa, eso es otro factor. Tienen que estar de acuerdo para que esto funcione”.
El lunes, Trump pareció cuestionar el progreso de las conversaciones al publicar en Truth Social: ”¿Es realmente posible que se estén logrando grandes avances en las conversaciones de paz entre Rusia y Ucrania? No lo crean hasta que lo vean, pero algo bueno podría estar sucediendo”, dijo .
Líneas rojas
Por su parte, Zelenskyy calificó las conversaciones como “sustantivas” y afirmó el lunes en redes sociales que “en este momento, es crucial que cada acción conjunta con nuestros socios sea cuidadosamente meditada. Todas las decisiones deben ser viables para garantizar una paz duradera y una seguridad garantizada... Juntos, sin duda, salvaguardaremos nuestros intereses compartidos y a nuestro pueblo”.
Oleksiy Goncharenko, un legislador ucraniano, dijo a CNBC el lunes que esperaba que las últimas conversaciones fueran fructíferas, pero que las garantías de seguridad eran “absolutamente vitales”.
“Hay algunas cosas en esta propuesta [plan de paz] que son inaceptables para Ucrania, hay algunas cosas que deberían cambiarse pero, en general, finalmente tenemos un marco y debemos trabajar en él y mejorarlo y eso es diplomacia”, dijo Goncharenko a ” Squawk Box Europe ” de CNBC.

Además de las garantías de seguridad, otras líneas rojas para Ucrania están relacionadas con la propuesta, en el plan original de 28 puntos, de que sus fuerzas armadas entreguen partes de la región del Donbás, incluidas varias ciudades grandes y fortificadas, que aún controlan. Nota del autor del blog , no es solo parte del Donbas sino 4 regiones enteras , ya están en la constitución de Rusia
“Creo que esto es algo inaceptable para Ucrania porque no podemos abandonar a nuestra gente”, dijo Goncharenko.
“La congelación del conflicto, el acuerdo de paz que debe alcanzarse en la línea del frente actual, es algo que se ha dicho muchas veces y creo que debemos mantenernos firmes en ello”, dijo.

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