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sábado, 16 de abril de 2016

Kuczynski apuesta por los antifujimoristas para ganar la presidencia en Perú .Por RYAN DUBE encontrado en el WSJ

Kuczynski apuesta por los antifujimoristas para ganar la presidencia en Perú

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 Pedro Pablo Kuczynski, candidato a la presidencia de Perú, saluda a sus seguidores al final de la primera vuelta electoral.

Pedro Pablo Kuczynski, candidato a la presidencia de Perú, saluda a sus seguidores al final de la primera vuelta electoral. PHOTO: GUADELUPE PARDO/REUTERS

Por RYAN DUBE

jueves, 14 de abril de 2016 12:43 EDT

LIMAPedro Pablo Kuczynski, un economista de 77 años, es visto por algunos como el candidato con más probabilidades de convertirse en el próximo presidente de Perú después de haber obtenido el segundo lugar en la primera vuelta electoral del domingo pasado.

Pero para llegar a la presidencia debe superar dos obstáculos: remontar la ventaja que Keiko Fujimori le sacó en la primera ronda, con casi el doble de los votos, y vencer la percepción de que está demasiado alineado con Estados Unidos.


“Va a ser un trabajo muy difícil”, dijo Kuczynski en una entrevista con The Wall Street Journal.

Para ganar, dijo, deberá contar con los índices negativos de popularidad de su oponente y de su famoso padre, el ex presidente Alberto Fujimori.

“Vamos a necesitar algo de ayuda”, dijo este ex ejecutivo de Credit Suisse First Boston, que habla inglés fluido y es conocido por sus rivales como “El Gringo”. “Pero hay un núcleo acérrimo de votantes antifujimoristas que es muy importante”.

Kuczynski, ex ministro de Economía y Finanzas de Perú, tendrá que ir cabeza a cabeza con su rival, de 40 años e hija de un ex presidente vilipendiado por muchos peruanos por haber encabezado un gobierno autoritario en la década de los 90. Fujimori padre, sin embargo, también es querido por otros por haber derrotado al grupo guerrillero Sendero Luminoso y por haber controlado la hiperinflación.

Kuczynski ha ganado un fuerte apoyo entre la comunidad empresarial y la clase media emergente de Perú, pero tiene problemas para conectarse con los votantes rurales pobres.

“Necesita que todos los votantes antifujimoristas se alineen detrás suyo”, dijo Steven Levitsky, politólogo y experto en Perú de la Universidad de Harvard. “Tiene que hacer realmente de esto uno de los puntos fuertes de su campaña, porque si no lo hace, ella (Fujimori) ganará”.

Kuczynski reconoce que su nombre no tiene el mismo reconocimiento que el de su rival, y que tampoco cuenta con la extensa organización política de base que convierte a Keiko Fujimori en una de las favoritas de los votantes rurales.

“Lo que tengo en mi favor es que mis índices negativos son muy bajos, mientras que ella tiene un núcleo acérrimo de gente que jamás votaría por ella”, dijo.

Kuczynski, que está casado con una ciudadana estadounidense, ha intentado atenuar la percepción de que es más extranjero que peruano y que está en el bolsillo de la elite. Hace poco renunció a la ciudadanía de EE.UU., que había obtenido tras muchos años de residir en ese país. En la campaña electoral, este antiguo flautista en la Orquesta Sinfónica de Perú ha estado tocado populares melodías andinas con su instrumento.

Sus partidarios citan las décadas de experiencia en el gobierno, en el Banco Mundial y en el sector privado. Destacando su modo de ser calmado y reflexivo, personas que lo conocen dicen que es el mejor candidato para revitalizar la economía peruana.


“Podría estar frente a uno de los peores problemas y lo asumiría con calma y trataría de hallar la mejor solución”, dijo Carlos Rojas, que en el pasado fue miembro de la junta directiva, junto con Kuczynski, de una compañía de harina de pescado.


Pero el candidato parece visiblemente incómodo en el rol de político populista. Prefiere hablar de la reducción del vasto mercado laboral informal en Perú a través de incentivos a las pequeñas empresas como la reducción de impuestos, para poner más trabajadores en nómina. También ofrecería incentivos fiscales a los inversionistas más grandes, como las empresas de minería e infraestructura, para que reinviertan sus ganancias, al tiempo que fomentaría el desarrollo del turismo y la agricultura.

Kuczynski destacó que las medidas ayudarían a la economía de Perú a crecer alrededor de 5% al año, en comparación con poco más del 3% de 2015.

“Debido a que somos dependientes de las materias primas, la gente dice que si China se enfría vamos a chocar contra un muro”, señaló. “Pero no tiene qué ser así. Hay una gran cantidad de cosas que podemos hacer”.

Kuczynski aseguró que un gobierno suyo también se centrará en un tema que preocupa a los peruanos: la delincuencia. Y dijo que quiere un mejor uso de los recursos del Estado para mejorar la educación y la prestación de servicios, como agua potable.


“Es hora de tener un país que se moderniza, que es socialmente más igualitario, más desarrollado de lo que es”, dijo.

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