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Las acciones de BP PLC cayeron un 7% en las operaciones de la mañana después de que el gigante energético británico dijera el domingo que abandonaría su participación de casi el 20% en el productor de petróleo controlado por el gobierno ruso Rosneft en un movimiento rápido luego de la presión de los funcionarios del Reino Unido después de la invasión rusa de Ucrania.
El golpe financiero para BP podría llegar a los 25.000 millones de dólares, dependiendo de lo que BP pueda recuperar de la venta de la participación de Rosneft, valorada en 14.000 millones de dólares a finales de año, según la compañía. Ese impacto incluiría un cargo no monetario de 11.000 millones de dólares por pérdidas cambiarias acumuladas, dijo BP. Pero los analistas dijeron que la medida podría tener ventajas a largo plazo para BP, lo que incluye desenredar a la compañía del empeoramiento del atolladero político y financiero ruso y centrar su atención en ganancias menos volátiles, incluida la energía renovable.
Es más, los analistas dicen que los precios más altos de las materias primas deberían beneficiar a BP y otras empresas con vínculos comerciales con Rusia a través de empresas conjuntas de producción de energía y otras inversiones. Incluyen TotalEnergies SE de Francia y el gigante petrolero británico Shell PLC. Las acciones de Total cayeron un 6% el lunes por la mañana, en comparación con una caída del 3% para Shell.
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