Independentistas en Europa: un deseo con
riesgos.
http://www.dw.de/independentistas-en-europa-un-deseo-con-riesgos/a-16310290?maca=spa-newsletter_spa_europa-al-dia-2768-txt-newsletter
"Gobierna, Britania! – pero no en Escocia!"
Este podría ser el eslogan del movimiento independentista escocés que, tras 300 años
de pertenencia al Reino Unido, celebrará en 2014 un referendo sobre su
independencia de Londres. Este 10 de octubre, el primer ministro británico,
David Cameron, y el jefe del gobierno regional escocés, Alex Salmond, firmaron
una acuerdo que permite la consulta popular.
Un aspecto interesante es que las regiones que se quieren independizar son, por lo general, pilares
de la economía de sus países. Según Eurostat, Cataluña
y el País Vasco, por ejemplo, aportan una cuarta parte al Producto Interno Bruto (BIP) español, a pesar
de representar menos del 10% del territorio nacional.
¿Solo por el dinero?
El Tirol italiano y la región en torno a Milano no quieren seguir financiando el débil sur de
Italia. Los escoceses, por parte, quieren administrar, por
cuenta propia, los dividendos del petróleo explotado en su territorio.
Pero en Bélgica la situación es
peor. Los separatistas flamencos exigen, con creciente ahínco, la
separación de la Bélgica francófona del sur. Flandes
representa solo una tercera parte del territorio belga, pero aporta casi el 60%
del BIP.
Parlamento belga en Bruselas, símbolo de la división
cultural..
Pero los motivos para querer la autonomía total no son
solo económicos, dice Silke Göttsch-Elten, etnóloga de
la Universidad de Kiel. "El idioma, la historia, la religión y la
geografía son aspectos que ayudan a crear una identidad”, agrega Silke
Göttsch-Elten.
Derechos traen consigo obligaciones
Pero querer autonomía no da derecho automático a la
secesión de un pueblo contra la voluntad del Gobierno central, explica Christian Hillgruber, profesor de la Universidad de
Bonn. "Los especialistas en derecho internacional coinciden en que la
independencia se contempla en caso de severas violaciones de los derechos
humanos como el genocidio en Kosovo.”
Y, a pesar de algunos actos violentos por parte de
separatistas en Europa, Hillgruber no ve similitudes con las guerras
separatistas en otras partes del mundo como Eritrea,
Timor o Sudán.
Christian Hillgruber ve los obstáculos de una
“independencia” por otra parte. “La región que se
quiera independizar tendría que asumir, eventualmente, parte de la deuda
nacional”, advierte el abogado de Bonn, para concluir que así, “los
separatistas pierden los ánimos y terminarían contentándose con cierta
independencia económica”.
Autor: Martin Koch /José Ospina-Valencia
Editor: Pablo Kummetz
No hay comentarios:
Publicar un comentario