‘Dr. Doom’ Nouriel Roubini is actually upbeat about the economy
El economista Nouriel Roubini ha sido un agorero durante tanto tiempo que se ha ganado el apodo de "Doctor Doom", pero sonó inusualmente optimista en medio del pánico reciente de Wall Street.
Durante una entrevista en Bloomberg TV el miércoles, desestimó los temores de los inversores de que se avecina una recesión y bromeó diciendo que los mercados de acciones y bonos han predicho 10 de las últimas tres recesiones.
Añadió que los mercados también han juzgado mal durante el último año cuántos recortes de tasas de la Fed están en camino, ya que los operadores han visto una flexibilización mucho más agresiva.
"Los mercados a menudo se equivocan sobre lo que está sucediendo con la economía y lo que la Fed va a hacer", dijo Roubini. "Hay algunas pruebas significativas de cierta desaceleración de la economía, pero no creo que los datos sugieran que vamos a tener un aterrizaje brusco en el corto plazo. En todo caso, en realidad hay algunos elementos de fortaleza en la economía".
Un momento, ¿qué?
Saltó a la fama cuando sus advertencias sobre la economía y la burbuja inmobiliaria fueron inicialmente ridiculizadas, pero se demostró que tenían razón cuando estalló la Gran Crisis Financiera.
Desde entonces, ha señalado con regularidad muchas otras catástrofes y, a fines de 2022, advirtió sobre una crisis de deuda estanflacionaria. Siguió dando la alarma hasta 2023, diciendo que era probable que se produjera una “recesión severa” en medio de un “Triángulo de las Bermudas” de peligros económicos y la “madre de todas las crisis de deuda”.
Sin duda, el consenso en Wall Street el año pasado era que Estados Unidos entraría en recesión después de la serie de aumentos de tasas más agresivos de la Reserva Federal en cuatro décadas.
Pero en septiembre pasado, cuando la economía seguía avanzando sin derrapar, suavizó su tono y dijo que era posible una recesión breve o superficial.
Los datos de empleo y de manufactura de Estados Unidos a principios de este mes mostraron un deterioro precipitado, lo que desencadenó una venta masiva de acciones en los mercados globales y proporcionó evidencia de que los pocos bajistas que quedan en Wall Street pueden tener razón.
Los datos de solicitudes de subsidio de desempleo semanales posteriores fueron inferiores a lo esperado, lo que calmó los nervios y ayudó al mercado de valores a recuperar gran parte de sus pérdidas.
Mientras tanto, otros en Wall Street han destacado los datos que indican una fortaleza subyacente en la economía. El economista jefe de Apollo, Torsten Sløk, dijo en una nota el sábado que el rastreador del PIB de la Fed de Atlanta apunta a un crecimiento del tercer trimestre del 2,9%.
"La conclusión es que todavía no hay señales de una recesión en Estados Unidos, y la economía estadounidense está bien con un crecimiento constante en los datos diarios y semanales de reservas de restaurantes, viajes aéreos, reservas de hoteles, datos de tarjetas de crédito, préstamos bancarios, asistencia a espectáculos de Broadway, ingresos brutos de taquilla y datos semanales de solicitudes de quiebra con tendencia a la baja", agregó.
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