Encrucijada
afgana (las elecciones son hoy) editorial del diario El país
http://elpais.com/elpais/2014/04/04/opinion/1396638020_213259.html
Las elecciones presidenciales
anticipan una era incierta que culminará con la retirada de la OTAN
Ataque a la sede del centro del jurado de elecciones en Afganistán.
Periodista alemana de AP asesinada hoy dia
Presidente Karsai enojado con EEUU por querer hacer una alianza con los talibanes directamente y fundar una especie de Emirato Islamico de Afganistan o mas bien un califato regido por la Sharia.
Los
partidarios del candidato presidencial afgano Abdullah Abdullah llegan para
asistir a un mitin electoral en Mazar-I-Shariff, el norte de Afganistán, 28 de
marzo de 2014. Elecciones presidenciales afganas se celebrarán el abril
5.REUTERS/Ahmad Masood (AFGANISTÁN - Tags: Política Elecciones TPX imágenes del
día)
EL
PAÍS 5 ABR 2014 - 00:00 CET
Las
elecciones de hoy en Afganistán para relevar al presidente Karzai después de 12
años —que requerirán segunda vuelta si ninguno de los aspirantes supera el 50%
de los votos— suscitan entre los afganos la esperanza de que algo sustancial
pueda mejorar. Y anticipan el temor a que la anunciada retirada a finales de año de los 50.000
soldados de la OTAN desemboque en una guerra civil. Los comicios, incluso si no son desfigurados por el
terrorismo talibán o el fraude —como el orquestado por el corrupto Karzai en su
reelección de 2009— serán solo un paso para un país acostumbrado a ser peón del
gran juego geopolítico.
Occidente no ha sido capaz de aportar
una solución política o militar en Afganistán tras muchos años de sangre (miles de soldados y
civiles muertos) y gastos exorbitantes.
El intento de imponer una Constitución
democrática a un país multiétnico y visceralmente tribal no ha funcionado.
Y se ha
ignorado que no se puede derrotar a un enemigo que dispone de un santuario
fronterizo, en este caso el poderoso y decisivo Pakistán.
Lo que
comenzó en 2001 con Washington decidido a hacer un escarmiento histórico por el
11-S acaba con EE UU y sus aliados
debilitados y divididos.
Nadie puede asegurar que el país
centroasiático no vuelva a convertirse en paraíso del terrorismo islamista.
Las
realidades de este escenario se imponen a las figuras de los aspirantes a la
presidencia.
Las
diferencias entre Abdullah, candidato opositor y
teórico favorito, Ashraf Ghani y Zalmay Rassoul
(el preferido por Karzai para cuidar sus intereses), todos antiguos altos
cargos gubernamentales, están relativizadas por los hechos.
En
Afganistán persisten
rivalidades políticas inmanejables; la presión
talibán es mayor que nunca; y la dependencia de la ayuda económica
exterior, que se reducirá drásticamente con la salida de la OTAN, es decisiva
para evitar el colapso de Kabul.
El país que
dejarán las tropas lideradas por EE UU —en una retirada que no es culminación
de un objetivo, sino certificación de un fracaso—
es un Estado tambaleante, donde los logros de la intervención no han sido ni
remotamente proporcionales al esfuerzo.
Incluso si
el nuevo presidente firma con Obama el acuerdo que Karzai ha rehusado para mantener
la presencia de unos miles de soldados de la OTAN, es más que improbable que el
Ejército afgano, que pierde por
deserción más hombres de los que recluta, sea capaz de frenar la explosiva
insurgencia fundamentalista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario