China se enojo, por el descaro de querer EEUU destruir a la tecnología China y suspende la financiación del gas de Alaska por US$ 43,000,000,000 no sería raro que se prohíban las importaciones entre los 2 países, y China expulse a las fabricas de EEUU que operan en China, esta noticia (del gas) no será nada bueno para el optimismo del accionariado mundial hoy o mañana.
La guerra comercial está obligando a China a “repensar los lazos económicos” con los Estados Unidos.
PUNTOS CLAVE
- “La guerra comercial de Donald Trump y la prohibición de Huawei empujan a China a reconsiderar los lazos económicos con Estados Unidos”, dice el periódico South China Morning Post, que cita a investigadores chinos.
- “La idea de que China debe comprar grandes cantidades de gas natural de los EE. UU. Debe volver a consultarse”, dice Wang Yongzhong, miembro de la Academia China de Ciencias Sociales, un grupo de expertos del gobierno.
- China está amenazando con dejar de financiar una industria en la que los dos países han realizado acuerdos considerables. En 2017, China acordó financiar un proyecto de gas natural en Alaska por un valor de US $ 43 mil millones, dijo el periódico South China Morning Post.
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China está explorando acciones más drásticas como resultado de su lucha comercial con los EE. UU., Según el South China Morning Post.
Mientras que China está dispuesta a reanudar las conversaciones comerciales, “los asesores gubernamentales ahora están resaltando el riesgo de obtener suministros críticos de un país cada vez más hostil ... y están explorando formas para que el país reduzca su exposición a los Estados Unidos”, dijo el periódico, citando Investigadores chinos. El artículo se tituló: “La guerra comercial de Donald Trump y la prohibición de Huawei empujan a China a repensar los lazos económicos con los Estados Unidos”.
Y China está considerando recortar las compras de gas natural de Estados Unidos como parte de este movimiento, dijo el diario.
“La idea de que China debe comprar grandes cantidades de gas natural de los EE. UU. Debe ser revisada”, dijo Wang Yongzhong, miembro de la Academia de Ciencias Sociales de China, un grupo de expertos del gobierno, al periódico con sede en Hong Kong.
La medida se produjo después de la última acción del presidente Donald Trump para poner en la lista negra a Huawei , lo que frenó su capacidad para comprar piezas y componentes de fabricación estadounidense. China amenaza ahora con detener la financiación de una industria en la que los dos países han realizado acuerdos considerables. En 2017, China acordó financiar un proyecto de gas natural en Alaska por un valor de $ 43 mil millones, dijo el periódico South China Morning Post.
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“China puede tener que limitar el suministro de los EE. UU. Al 10 o 15 por ciento de sus compras en el extranjero por el bien de la seguridad de la cadena de suministro”, dijo Wang, quien se especializa en la seguridad del suministro de energía de China. ″¿Qué pasa si el suministro de [energía] [incluido tanto el gas natural licuado como el petróleo] se corta repentinamente, como hemos visto en el caso de Huawei?”
China compró 6.300 millones de dólares en crudo y GNL de EE. UU. En 2017, el 3,6% de las compras de productos energéticos extranjeros del país, dijo el periódico, y agregó que la confianza de China en los productos energéticos de EE. UU. Es “limitada”.
Las restricciones estadounidenses sobre Huawei obligaron a las empresas de tecnología y fabricantes de chips, entre ellos Google y Qualcomm, a cortar el vínculo con el gigante chino de las telecomunicaciones hasta que Estados Unidos otorgó una licencia de 90 días para mantener en línea las redes existentes. La prohibición provocó una gran venta masiva de acciones de semiconductores el lunes.
El presidente chino, Xi Jinping, incrementó su retórica sobre la guerra comercial el lunes al decir que China se está embarcando en una “nueva Marcha Larga, ¡y debemos comenzar de nuevo!”
Las negociaciones comerciales entre los dos países más grandes del mundo han llegado a un obstáculo después de que Trump siguió adelante con su amenaza de aumentar los aranceles de $ 200 mil millones en productos chinos del 10% al 25%. China respondió de inmediato elevando los aranceles de $ 60 mil millones de productos estadounidenses hasta un 25%.
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