Irán: advierten que el régimen desplegó escuadrones iraquíes para reprimir las protestas
Mercenarios afganos que se encuentran combatiendo en Siria también fueron trasladados al país por la Guardia Revolucionaria para contener las masivas manifestaciones, según fuentes de la provincia de Ahwaz
Pese a que este jueves la situación en Irán estuvo más calma, las autoridades persas siguen alertas luego de varios días de masivas protestas contra el régimen de Hasan Rohani. En medio de las críticas sobre la República Islámica por la violencia ejercida contra los manifestantes -21 personas murieron-, la cadena Al Arabiya informó que fuentes de la provincia iraní de Ahwaz revelaron que el régimen desplegó a fuerzas de movilización iraquíes y mercenarios afganos para reprimir las protestas.
Esas fuentes indicaron que fueron desplegados junto a la Guardia Revolucionaria y las fuerzas de seguridad iraníes en las calles de Abadan y Khorramshahr, y en el barrio de Al Thawra en Ahvaz.
El sitio Amad News, por su parte, señaló que mercenarios afganos, que también están luchando en Siria, fueron trasladados a la ciudad de Jomeyni Shahr, en Isfahan, por la Guardia persa para reprimir a la sociedad civil que se manifestó durante los últimos seis días.
Mientras tanto, los llamados entre la población para alzarse contra el régimen siguen latentes. En Ahwaz, el miércoles una persona fue arrestada por distribuir panfletos. En esa región las concentraciones se producen generalmente durante la noche.
Las fuerzas de seguridad se despliegan principalmente alrededor de bancos y estaciones de policía.
El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán proclamó el miércoles el fin de las protestas en las que murieron 21 personas y cientos fueron arrestadas tras chocar con las fuerzas de seguridad, poco después la celebración de masivas manifestaciones de apoyo al Gobierno.
Durante la jornada del miércoles no se registró ninguna manifestación contra el Gobierno, en contraste con las noches anteriores de protestas contra la austeridad económica y la falta de libertad en el régimen teocrático.
El jefe de la Guardia Revolucionaria, Mohammad Ali Jafari, afirmó que el número de "agitadores" "no había superado las 15.000 personas en todo el país". Y añadió, en unas declaraciones publicadas por la agencia Tasnim, controlada por el grupo, que podía anunciar "el fin de la sedición".
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