Vistas de página en total

sábado, 11 de junio de 2022

Santiago Niño-Becerra: «La tecnología será la protagonista indiscutible, lo que viene es otra galaxia y un nuevo orden mundial»

 

Santiago Niño-Becerra: «La tecnología será la protagonista indiscutible, lo que viene es otra galaxia y un nuevo orden mundial»

https://www.lavozdegalicia.es/noticia/economia/2022/06/11/tecnologia-sera-protagonista-indiscutible/0003_202206G11P29992.htm?utm_source=facebook&utm_medium=referral&utm_campaign=fbgen

ECONOMÍA

El economista Santiago Niño-Becerra, el jueves en el Museo do Pobo Galego.
El economista Santiago Niño-Becerra, el jueves en el Museo do Pobo Galego. XOAN A. SOLER

«Teniendo en cuenta las previsiones del Banco Mundial, este verano será un 'Carpe diem'», apunta el doctor en Economía que predijo la crisis del 2009. Él señala como cualidad clave la resiliencia para afrontar el nuevo modelo

11 jun 2022 . Actualizado a las 10:00 h.

El mundo que conocemos irá desapareciendo, irá siendo reemplazado por otro en el que «el poder lo tendrán las grandes corporaciones, no los Estados» y donde la tecnología será la clara protagonista, apunta el doctor en Economía y catedrático emérito de la Universidad Ramón Llull, de Barcelona, Santiago Niño-Becerra, autor de Futuro, ¿qué futuro? Claves para sobrevivir más allá de la pandemia, en el que dibuja el mundo que vendrá en los ámbitos económico, social, en la empresa y en casa, en la realidad geopolítica mundial y en nuestras realidades cotidianas.

—El Banco Mundial habla de recesión, de estanflación. ¿Cómo valora sus últimas previsiones?

—Son unas previsiones demoledoras, ponen los pelos de punta. He ido al informe completo y resaltaría un par de datos: en enero, el Banco Mundial dijo que el mundo crecería el 4,1 % en el 2022. Ahora lo ha bajado al 2,9 %. Las economías avanzadas pasan del 3,8 % de enero al 2,9 % de junio. Para que se haga una idea, entre 1950 y 1973, el mundo creció al 5 % de media. Esta previsión es de ahora y nos dice: «No estamos bien, pero vamos a peor».

—¿Esta inflación no tiene nada que ver con la de los años ochenta?

—Nada que ver. Es una inflación de oferta que el mismo Banco Mundial dice que se parece a la que hubo en los setenta.

—¿Qué escenario nos espera? ¿Este año se recuperará, como han dicho, el turismo en España?

—Me da la sensación de que este verano va a ser un carpe diem: «Vive el momento, que en otoño las cosas se van a torcer realmente».

—La clave será adaptarse, asegura, ser flexible.

—Sí. El tema de la adaptabilidad nos lleva a la tecnología. Habrá personas que no van a saber (porque no pueden) adaptarse, independientemente de su inteligencia. No podrán hacerlo por pura incapacidad físico-mental. Vivimos un gran cambio en el que la tecnología, cualquier tipo de tecnología, va a ser la protagonista indiscutible, si no única.

—En las Xornadas Tecnolóxicas de R, celebradas este jueves en Santiago, señaló la resiliencia como la cualidad clave en personas y empresas. Es un concepto omnipresente, está incluso en los informes del BCE. ¿Qué generación será la más resiliente?

—A la generación Z la veo muy verde: les han dado tortas, no ven expectativas... A los millennials les veo más capaces, es una mezcla de carácter y forma de ser. Un millennial gasta si tiene y, si no, no gasta. Muchos millennials no solo no tienen coche, no tienen ni carné de conducir. Esa generación es de supervivientes natos. Recuerdo la pregunta que me hizo un alumno de la Z: «¿Por qué voy a tener que pagarle la pensión?». Yo le dije: «Es que tal vez no puedas pagármela». La generación Alfa, la siguiente, no podrá comparar. Estos niños yo creo (y estoy caricaturizando) que nacen con un cromosoma más, el cromosoma tecnológico. Es la primera generación para la cual la tecnología es una parte de sí.

—¿Habrá Metaverso para todos?

—Sí. Metaverso es la web 3.0. Pienso que el 95% de ese mundo se va a dedicar al ocio. Yo hablo del trinomio social: «Renta básica, marihuana legal y ocio gratuito para todos». La tecnología seguro que se usará también para hacer cirugías, probar estructuras de ingeniería... Eso seguro.

—¿Cabe aguardar una evolución?

—Sí, pero habrá también una evolución de la desigualdad. La desigualdad va a más. Aquí va a haber «los que sí y los que no», «los de antes y los de después». «Los que sí» serán los que generen, los integrados, los que participen... Ya estamos hablando de otra galaxia, pero eso no minusvalora en absoluto el poder de la tecnología. En el nuevo modelo que viene habrá dos claros protagonistas: uno será la tecnología, en general, no solo el Metaverso, y otro, el nuevo orden internacional que se está cociendo, en el que China será la clara ganadora. Europa en este nuevo orden, claramente, pierde.

—¿Pero habrá cambios positivos en el trabajo, en el ámbito de la salud o en el avance de las energías alternativas frente al petróleo y al gas? ¿Qué es lo mejor que nos deparará la tecnología?

—Esto tiene su parte buena. En clase analizamos la película Matrix, que tiene dos lecturas, la buena y la mala. La mala está clara, y la buena... En EE.UU., por ejemplo, se ha logrado reconstruir una oreja humana usando el tejido de la paciente para crear un bioimplante con tecnología de impresión 3D. Esto es parte de lo bueno.

—¿Desaparecerán las ideologías, qué papel tendrá la política?

—Yo a la política, tal como la hemos conocido o la conocemos hoy, le veo un recorrido muy corto. 

—¿Pero habrá partidos, solo un partido?

—Bueno... puede haberlos, pero su capacidad de influencia será mínima. Dependerá de decisiones que tomen las grandes corporaciones. Yo pongo el ejemplo siguiente: si retrocediésemos a los sesenta, no más atrás, y fuésemos a Francia, Alemania, Italia, España... y dijésemos: «En el 2000, todos los países europeos cederemos toda nuestra autonomía monetaria a una cosa que se llamará el Banco Central Europeo», no se lo creería nadie. Cedimos nuestra autonomía monetaria al BCE y él es quien decide los euros que pueden imprimir España, Francia... y a la vez es el inspector de todos los bancos de la UEM.

—¿Hemos cedido esa autonomía engañados?

—Bueno, no lo sé, pero algo que hace 50 años era absolutamente impensable hoy lo tenemos, y lo hemos asumido. O nos lo han impuesto, pero el caso es que está funcionando. Entonces, cosas que hoy nos pueden parecer inimaginables o de ciencia ficción dentro de diez o quince años pueden estar perfectamente operativas. La eutanasia hace 20 años era inimaginable, y ahora la tenemos legal en varios países. 

—El nobel Kazuo Ishiguro, a quien cita en su último libro, crea una amiga artificial especializada en cuidado de niños y Jeannette Winterson dice que nos enamoraremos de robots. ¿Habrá una convivencia armónica entre las inteligencias artificial y humana?

—Creo que hay dos niveles de aproximación al tema. Por un lado, queremos creer que podemos convivir con las máquinas, en un entorno rodeado de máquinas. Habrá una convivencia a todos los niveles, nos ayudarán... Esto es lo que queremos creer. Pasará, sí, pero mucho menos de lo que queremos creer. Pongo un ejemplo. Actualmente, las empresas automovilísticas están usando unos exoesqueletos para el trabajador tenga que hacer menor esfuerzo, y funciona realmente. El paso siguiente es dar más funciones a ese exoesqueleto. Y el paso posterior es que lo haga todo el exoesqueleto, sin necesidad de persona. Llegado este punto, ¿la convivencia cómo será? Otro ejemplo: recuerdo que los primeros robot-aspirador costaban entre dos mil y tres mil dólares. Actualmente, puedes conseguir por 300 euros uno de estos trastos que van realmente bien. ¿El paso siguiente cuál será? Quizá que el trasto decida cuándo tiene que limpiar, qué debe limpiar más...

—Igual con eso se acaba la explotación laboral de mujeres dedicadas a la limpieza del hogar.

—Pero la explotación de esas mujeres se podría arreglar, pero parece que esto no se quiere abordar; es un tema legal. Si esos trastos que limpian llegan a hacerlo tan perfecto que puedan sustituir a esas señoras, ¿qué harán esas señoras, en qué trabajarán entonces?

—Señala que, con los años, ha cambiado drásticamente el concepto de crecimiento. ¿Cómo puede hacerse sostenible? ¿Será, por ejemplo, sostenible el sistema de pensiones?

—El crecimiento será sostenible, pero en la zona baja. Instituciones como el sistema de pensiones que hemos conocido, argumentado con la normativa que hemos conocido, no será sostenible. 

—¿Qué mensaje lanzaría a las empresas respecto al nuevo modelo que está por venir para que superen el desafío?

—Que analicen permanentemente su viabilidad, que sean abiertas y flexibles, que miren lejos y que colaboren entre ellas.

—Hay inversiones millonarias en Metaverso, ¿seremos más avatares que personas, seremos una realidad híbrida? ¿Se implantará, finalmente, el teletrabajo?

—Los avatares se parecerán cada vez a las personas que los están usando, yo creo. Cuando se combine esto con proyecciones holográficas será lo máximo. Cuando se llegue a eso, el teletrabajo se va a imponer, por descontado. Esto depende sobre todo de dos cosas, de que la tecnología evolucione, que lo hará, y depende del coste de la tecnología. Hay dos tipos de tecnología, la de consumo, la de uso cotidiano, incluso para empresas, y la tecnología de punta, que es la que marca el hecho diferencial, la que te da la ventaja competitiva. Para desarrollar esta, harán falta cantidades gigantescas de capital, otra cosa que favorecerá la creación de corporaciones. 

Las Xornadas Tecnolóxicas de R inciden en la transformación digital del sector empresarial

O. P. ARCA

La transformación digital de las empresas es un paso inevitable para evitar quedarse atrás. Es la principal conclusión de las jornadas tecnológicas organizadas en Santiago por R, bajo el título de O teu futuro decídelo hoxe. Y es que los distintos expertos reunidos por el operador telefónico aconsejan no dejar pasar tiempo para iniciar la integración de las nuevas tecnologías en cada área de la empresa, y emprender así una transformación digital real.

Isidro Fernández de la Calle, director de Empresas de R, destacó que el operador se ha volcado en las ayudas europeas a las pymes para afrontar ese cambio: «Hemos desarrollado un portfolio muy amplio para colaborar en este proceso inevitable de transformación digital, que vemos como una apuesta estratégica a largo plazo». Aunque considera complicado que los fondos Next Generation logren una transformación digital de gran calado en el tejido de las pymes, sí serán «una manera de dar ese paso necesario, y les echarán una mano para ese proceso».

No hay comentarios:

Publicar un comentario