sábado, 28 de marzo de 2020

Es increíble la cantidad de negligencias administrativas en los hospitales de EEUU, los trabajadores de sanidad están aterrorizados, así como los pacientes de otras patologías.


Es increíble la cantidad de negligencias administrativas en los hospitales de EEUU, los trabajadores de sanidad están aterrorizados, así como los pacientes de otras patologías.

Los trabajadores dicen que el hospital de la ciudad de Nueva York arrastró con las protecciones del coronavirus a medida que se extendía la pandemia

PUNTOS CLAVE
  • Los trabajadores sociales en un hospital de la ciudad de Nueva York que luchan contra el brote de coronavirus dicen que el hospital se esforzó por tomar precauciones para proteger al personal de la infección.
  • “La semana pasada no nos dejaron usar máscaras y nos dijeron que [el coronavirus] no se propagó en las superficies o la ropa”, dijo a CNBC uno de esos trabajadores sociales de NYU Langone Health.
  • La ciudad de Nueva York es el epicentro del brote de COVID-19 en los Estados Unidos.
GP: Coronavirus Escena de la ciudad de Nueva York en medio de Covid-19
Una vista de ambulancias estacionadas frente al hospital Langone de la NYU en medio del brote de coronavirus (COVID-19) el 26 de marzo de 2020 en la ciudad de Nueva York.
John Nacion | NurPhoto | imágenes falsas
Los trabajadores sociales en un hospital de la ciudad de Nueva York que luchan contra el brote de coronavirus dicen que el hospital se esforzó por tomar precauciones para evitar que se infecten o posiblemente propaguen COVID-19 a los pacientes.
Una de las mayores quejas de los trabajadores sociales de NYU Langone Health en Manhattan fue la insistencia de la gerencia de que continúen llegando al trabajo en lugar de hacer que hagan su trabajo de forma remota.
Los trabajadores también se quejaron de la falta de equipo de protección personal, prácticas inseguras para contratar turnos y falta de espacio de trabajo adecuado para evitar el contacto cercano con colegas.
“La semana pasada no nos dejaron usar máscaras y nos dijeron que [el coronavirus] no se propagó en las superficies o la ropa”, dijo a CNBC uno de esos trabajadores sociales de NYU Langone.
Solo el 20 de marzo permitieron a los trabajadores sociales usar máscaras quirúrgicas, lo que evita que los trabajadores sociales propaguen cualquier infección que puedan tener, pero no protegen al usuario de contraer el virus, como están diseñadas para las máscaras N95.
“Nos dieron una máscara”, dijo otro trabajador social. “Una máscara que protege a los pacientes de aquello a lo que podríamos exponerlos”.
“Estas máscaras no nos protegen”, dijo el empleado.
NYU Langone le dijo a CNBC que el hospital estaba tomando medidas para proteger a los trabajadores y pacientes.
Pero el hospital, en un comunicado, dijo que adoptar nuevas políticas para proteger al personal ha sido un “proceso continuo: estamos aprendiendo cada día nuevas y mejores formas”.
Mientras tanto, los casos de coronavirus han aumentado dramáticamente en NYU Langone y otros hospitales en toda la ciudad de Nueva York.
La Gran Manzana es el epicentro del brote de COVID-19 en los Estados Unidos, con más de 29,000 casos, o más del 25% del total nacional de casos. Alrededor del 20% de los casos de la ciudad han requerido hospitalización. La mayoría de las más de 500 muertes en el estado de Nueva York por el virus han ocurrido en la ciudad de Nueva York.
La escasez de equipo de protección personal ha sido un problema en los hospitales de la ciudad de Nueva York, y el personal de uno de ellos, Mount Sinai West, usó bolsas de basura como prendas de vestir porque los vestidos se habían agotado , según una foto que ha llamado la atención generalizada.
Un asistente de gerente de enfermería de 36 años, Mount Sinai West, Kious Kelly, murió de COVID-19.
En una conferencia de prensa el sábado por la mañana frente al Hospital Jacobi en el Bronx, las enfermeras dijeron que necesitaban más máscaras y otros equipos de protección.
El viernes, el Dr. Craig Smith, cirujano en jefe del NewYork-Presbyterian / Columbia University Medical Center, en una carta a la facultad y al personal escribió: “El enemigo está dentro del cable”, en referencia a las infecciones de los empleados en ese hospital, Un importante centro médico en la ciudad.
“Esto se volvió inevitablemente obvio ayer cuando otro colega fue intubado”, escribió Smith. “Solo uno de un número inquietante de nuevos casos de ventiladores en [el hospital], pero una prueba para todos de lo real que se está volviendo esto”.
“Siguió un aumento generalizado de ansiedad, con cadenas de texto de una noche entre los recién sacudidos”, escribió. “¿Cuál es la respuesta adecuada? Primero, en el nivel más práctico, acepte que no hay lugar para esconderse. El virus no tiene opinión sobre la clase, la raza, el estado socioeconómico o la estatura profesional ”.
Los trabajadores sociales de la NYU Langone dijeron que comenzaron a preocuparse hace unas semanas por la propagación de COVID-19 al personal y el riesgo de infectar a los pacientes como resultado.
“Muchos de nuestros pacientes están dando positivo”, dijo el primer trabajador social Langone de la NYU que habló con CNBC.
“Los pacientes con los que he hablado están aterrorizados”, dijo el trabajador. “Todos ellos me han llorado por teléfono”.
Ese trabajador social también dijo que los supervisores de Langone de la NYU se han resistido a las solicitudes de los empleados de trabajar desde casa y llamar a los pacientes por teléfono, en lugar de interactuar con ellos. 
“Todavía nos hicieron ver pacientes en sus habitaciones hasta esta semana”, dijo el trabajador social. “Y ahora no se les permite ver pacientes en su habitación”.
Sin embargo, todavía se llama a los trabajadores sociales al hospital donde están sentados en una oficina muy cercana entre sí.
“Están mucho más cerca” que la brecha de seis pies recomendada para evitar la propagación del virus, dijo el trabajador, y agregó que el hospital esperó hasta el lunes pasado para decirle a todos los trabajadores del hospital que deben cambiarse a un conjunto de ropa nueva después del trabajo.
Un colega, que también habló con CNBC bajo condición de anonimato porque no están autorizados a hablar con la prensa, señaló que los supervisores están “permitiendo que algunos trabajadores que ingresaron” notas los excusen de trabajar por razones médicas para trabajar de forma remota.
“El resto de nosotros estamos en primera línea en un hospital lleno de pacientes con COVID-19 positivo”, se quejó el segundo trabajador social.
“En este punto, solo estamos hablando telefónicamente con los pacientes, las familias”, dijo el segundo trabajador social. “Por lo tanto, no tiene sentido por qué nos piden que entremos al edificio todos los días”.
El segundo trabajador social se opuso a la solicitud del hospital para que el equipo continúe su viaje al trabajo, lo que incluye tomar el transporte público. “Son cuerpos adicionales innecesarios que solo podrían causar la propagación de este virus”, dijo el trabajador.
En la declaración a CNBC, cuando se le preguntó sobre las preocupaciones de los trabajadores, una portavoz de NYU Langone escribió: “Para aquellos empleados que han sido clasificados como ‘no esenciales’, se les ha recomendado trabajar desde casa”.
“Se les pide al personal esencial que vengan a trabajar y que usen equipo de protección, si están en contacto cercano con el paciente”, dijo el comunicado.
“Estamos proporcionando ese equipo de protección basado en las pautas de los CDC. Además, la implementación de políticas que protegen a nuestro personal es un proceso continuo: estamos aprendiendo cada día nuevas y mejores formas de proteger a nuestros trabajadores, y continuaremos haciéndolo hasta que termine esta crisis ”.
VIDEO 13:41
Cómo Estados Unidos se retrasó en las pruebas de coronavirus
Las preocupaciones de los trabajadores sociales se transmitieron casi dos semanas después de que la ciudad de Nueva York comenzó a restringir drásticamente los negocios no esenciales e instar a las personas a mantenerse a una distancia de seis pies entre sí.
Si bien los hospitales se consideran esenciales debido a la atención médica que brindan los médicos y las enfermeras, su personal incluye trabajadores no esenciales que no necesariamente necesitan estar en el sitio.
Una mujer que respondió a un teléfono en la oficina de recaudación de fondos de la NYU el viernes dijo que había estado trabajando remotamente durante las últimas dos semanas.
Pero el primer trabajador social que habló con CNBC dijo incluso ahora: “Muchos empleados no esenciales entran y salen” del hospital, que se encuentra en el East Side de Manhattan.
Los terapeutas en arte, horticultura y aceites esenciales todavía se ven obligados a ir a trabajar, dijo el trabajador social. Esto se suma a los controles prequirúrgicos, cuyo trabajo es llamar a los pacientes entrantes para prepararlos para la cirugía y no necesitan verlos personalmente. 
“Todas estas personas toman el metro todos los días”, dijo el trabajador.
“Simplemente está trayendo más cuerpos y propagando” el virus potencialmente ”.
Cuando la empleada planteó esas preocupaciones con un supervisor, “ella me dijo que NYU estaba al tanto”.
Ese mismo supervisor le dijo al trabajador que el coronavirus no podía propagarse en superficies duras, lo cual no es cierto, señaló el miembro del personal.
El trabajador dijo que “usamos nuestras huellas digitales para entrar y salir” en el sistema de cronometraje de nómina del hospital.
Esa superficie de huellas digitales es utilizada por cientos de empleados. Se les dijo a los trabajadores que usaran Purell para limpiarse los dedos después y se desaconsejó el uso de un sistema de reloj de computadora.
“Esta semana cambiaron la política” del sistema de huellas digitales, dijo el trabajador, aunque los empleados todavía tienen que usar el mismo teclado para ingresar números para ingresar y salir.
“Todos siguen usando el mismo panel táctil”, dijo el trabajador.

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